El Slask Wroclaw sueña con la salvación en la Ekstraklasa. Algo que parecía impensable hace no tantas jornadas lo tiene alcance de la mano gracias a sus últimos buenos resultados. El cuadro polaco, que suma 17 campañas consecutivas en la élite, se resiste a abandonarla, y parte de esta mejora es culpa de Marc Llinares. El lateral izquierdo, que aterrizó en el equipo el pasado mercado invernal procedente de un Hammarby Fotboll sueco en el que militó campaña y media, se ha adueñado del flanco zurdo de la zaga desde su llegada y el buen hacer de su equipo coincide con su presencia en el once.
Marc Llinares se estrenó con el Slask Wroclaw con derrota y el equipo se quedó, en la jornada 20, a diez puntos de la salvación. Una misión casi imposible. Pero los buenos resultados se han ido repitiendo en las últimas jornadas y el conjunto del catalán ya está a solo tres puntos de abanzonar los puestos de descenso. Y con el defensa como pieza destacada del equipo.
Desde su llegada, Llinares se ha convertido en un fijo en el lateral izquierdo. Ha sido titular en las ocho jornadas en las que ha estado disponible, y solo en dos no ha completado los 90 minutos al haber sido sustituido. Su derroche físico le convierte en una pieza clave para el Slask Wroclaw, equipo que por primera vez esta campaña suma dos victorias seguidas al haber derrotado a Stal Mielec (1-4) y Lech Poznan (3-1). Con 14 partidos por disputarse, el equipo ve la permanencia en la categoría más cerca que nunca.
Tras no encontrar su sitio en el Hammarby Fotboll, donde su presencia fue de más a menos, Marc Llinares parece haberlo hecho en el Slask Wroclaw. El barcelonés, que tras formarse en las canteras de Villarreal CF, Damm CF y RCD Mallorca pasó por Primera Federación en las filas de Algeciras CF, CA Osasuna B y Albacete Balompié, disfruta del fútbol de élite en Polonia, donde Emart&Soccer tiene una amplia colonia de jugadores. ¡A seguir luchando, Marc!
